¿Qué es el Riesgo operativo?
El riesgo operativo en el ámbito bancario en España se refiere a la posibilidad de pérdidas como resultado de fallas en los procesos internos, sistemas o personas en una entidad financiera. Esto puede incluir errores en los cálculos, fraudes, robos, fallas técnicas o incluso catástrofes naturales.
Un ejemplo de reclamación relacionada con el riesgo operativo podría ser un cliente que intenta realizar una transferencia bancaria pero el sistema se cae, lo que resulta en una transferencia tardía y una penalización financiera como resultado. Otro ejemplo podría ser un empleado de un banco que comete un error en un cálculo y resulta en una pérdida financiera significativa para la institución.
En España, el riesgo operativo se regula en la Ley 10/2014, de Ordenación, Supervisión y Solvencia de Entidades de Crédito, y también en la Circular 4/2017 del Banco de España, que establece los requisitos mínimos para la gestión del riesgo operacional en las entidades financieras. Es importante que las entidades bancarias tengan planes de contingencia para minimizar los riesgos operativos y proteger a sus clientes y su propia estabilidad financiera.
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